El recién nacido posee numerosas capacidades: succiona
y traga alimentos, elimina residuos, duerme, interactúa con el medio llamando
la atención de los otros y reaccionando ante estímulos del entorno, actuando
rudimentariamente sobre las cosas.
El niño cuenta con tres sistemas, uno para recibir
información, otro para actuar y otro para transmitir información.
- Para recibir información utiliza la percepción
visual, auditiva, táctil etc.
- Para actuar utiliza los diferentes reflejos, que
serán explicados en otro post del blog.
- Y, por último, para transmitir información utiliza
el llanto, la sonrisa etc.
Hoy vamos a hablar sobre este último, es decir sobre
como el infante transmite información y es que, aunque el niño, en un
principio, no tiene la intención de comunicar nada a los adultos, ya que estos
no existen para él, éstos reciben información útil para atender a sus
necesidades.
El llanto es una conducta que se produce como
respuesta refleja a un estado de malestar. La llamada del sujeto no es intencional,
pero en el adulto produce una respuesta favorable. Se distinguen en los niños
pequeños cuatro tipos de llanto:
-Llanto básico: Llanto regular, rítmico,
generalmente asociado con el hambre.
-Llanto de cólera: Una variante del llanto
rítmico, en la que una cantidad excesiva de aire pasa por las cuerdas vocales.
-Llanto de dolor: La súbita aparición de un
fuerte llanto, sin quejas previas, que en ocasiones es seguida por la
contención del aliento.
-Llanto de atención o por frustración: Aparece a
partir de la tercera semana, dos o tres lloriqueos, sin una contención
prolongada del aliento.
Además, en las madres se han observado ciertos cambios
en respuesta al llanto de los hijos. Y se ha observado que el llanto de dolor
produce respuestas más inmediatas en los adultos que el de hambre.
Si tienes cualquier duda, e incluso si no observas estos
tipos de llantos en tu hij@ no dudes en ponerte en contacto con los
profesionales de Mi Psicólogo Getxo. Te atenderán en Algorta-Getxo o en Bilbao.
