Sin duda ¡te gusta!, y lleváis algún tiempo observándoos discretamente, pero aún no te invita a salir. Tomar el riesgo de invitar a la persona de tus sueños puede resultar todo un desafío. Sin embargo, conseguir que el otro dé el primer paso puede ser mucho más fácil de lo que imaginas.
Dejar claro que te gustaría que se acercara a ti sin
ser demasiado evidente o caer en coqueteos exagerados ha de ser la técnica
correcta, pero ¿cómo lograrlo? Sigue leyendo este artículo y aprende a llevar a
esa persona a tu terreno de juego sin que lo note.
¿Cómo comenzar?
Hacerle saber a alguien que te atrae, inicia con un
proceso tanto físico, como emocional, que incluye sonrisas, miradas, y abrazos
o roces de piel para que comprenda que estás aceptando su presencia. Algunas
personas temen ser mal interpretadas por sus acciones, y les aterran los
rechazos, por lo que ofrecerle ciertas señales de tu aceptación le motivará a
invitarte a salir.
¿Cómo no ser tan
evidente?
Una persona equilibrada y segura de sí misma, es mucho
más sensual que alguien que está sudando, temblando, riendo descontroladamente
o que se sonroja cada vez que alguien le habla.
Por mucho que te guste, debes mantener un halo de
misterio sobre ti. Este será tu pasaporte para conseguir que se interese en
conocerte mucho mejor. ¡Desde ahora respira profundo, y mantén nervios de acero
cuando se te acerque!
Emplea temas
sencillos
Las conversaciones son la mejor forma de conocerse.
Compartir historias simples y divertidas, como por ejemplo mostrarle un mensaje
llamativo que te llegó al móvil y del cual pueda surgir una conversación amena,
es la mejor manera de llamar su atención y propiciar un acercamiento
interesante.
Que entienda que
estás disponible
Evita que mal interpreten tus señales de amor. ¡Así
que no seas ambiguo!, esa persona debe comprender que tú estás absolutamente
soltero(a) y disponible.
Deja ver en tus conversaciones que dispones de tiempo
para salir el fin de semana, que deseas ir al cine, e incluso que te quedarás
solo en tu casa. Así él intentará crear una conexión contigo, sin miedo a
equivocarse.
Cerciórate de su
soltería
Si sabe que te gusta y ya le demostraste que estás
soltero y esperando su invitación, pero esta no llega, ¡es probable que esté en
una relación!
¡En ese caso
mejor sigue adelante!
Si no es el caso, puede ser momento de sugerirle que
“deberían salir juntos en algún momento”, espera ver su reacción, y analiza su
respuesta. Así determinarás si vale la pena o se interesa por ti.
Puede estar
decepcionado
¡Tal vez no es el momento! Le gustas, pero acaba de
salir de una relación en la que las cosas no terminaron de la mejor manera por
lo tanto está cansado(a) como para salir por ahora. En este caso, ten paciencia
porque serás su próxima cita tarde o temprano, solo que está preparándose
emocionalmente para evitar que su fracaso anterior interfiera en su vida. Continuar
como amigos puede ser muy gratificante para ambos en este punto, de esta manera
podrán coquetear y conocerse mucho mejor, al tiempo que fortalecen cualquier
vínculo emocional.
En resumen, asumir que, aunque alguien te guste e
incluso aunque esta emoción sea correspondida, no significa que la invitación para
salir ocurrirá cuando tú lo esperas, sino cuando ambos se sientan realmente a
gusto con el otro.
No aceleres las cosas, mantente ocupado, y sé cortés.
Solo así obtendrás respeto y admiración, dos claves necesarias para obtener
citas y relaciones de pareja duraderas.
