Para comprender el comportamiento que propicia que a
alguien le adjudiquen esta palabra, primero tenemos que saber cuál es el
significado del término. Y es que ser considerado maquiavélico, es una palabra
que se emplea para definir a quienes, haciendo uso de la astucia, manipulación
y de su fuerte influencia personal, controlan a quienes le rodean para así
obtener beneficios y alcanzar sus intereses personales.
En la historia de la humanidad, muchas personas han
sido vistas como referentes del maquiavelismo, entre ellos políticos,
dictadores e incluso líderes religiosos. Fundamentalmente se considera que las
tres cualidades que identifica a un maquiavélico son las tendencias narcisistas,
psicopatía y manipulación.
Un individuo que posee alguna de estas
características, puede llegar a cometer algún delito o hacer que otro lo cometa
para satisfacer sus propias necesidades sin experimentar complejos, ni culpas. Por
eso hay que saber reconocer cuando podemos estar en presencia de un
maquiavélico, e incluso si estás convirtiéndote en uno. ¿Cómo son las personas
maquiavélicas?
1.- Pueden tener
comportamientos psicópatas
Esto no quiere decir que necesariamente vayan a matar
a alguien, pero la impulsividad descontrolada y la violencia con la que se
manejan, los hace capaces de efectuar cualquier cosa con tal de sentirse
complacidos.
2.- Dicen una
cosa y hacen otra
Esta actitud es muy común en los manipuladores. Cuando
quieren obtener algo, pueden llegar a incurrir en mentiras y engañar para
cumplir con sus objetivos.
3.- Siempre velan
por sus propios intereses
Aunque pueda haber cosas que requieren una mayor
atención o dedicación, siempre van a buscar desplazarlas con aquellas que les
traigan beneficios y satisfagan sus propios intereses, sin importarles que
alguien pueda verse afectado por ello.
4.- Son
desconfiados y controladores
Nunca revelan más información de la necesaria, confían
en pocas personas y estas siempre resultan manipulables, ya que les hacen creer
que son importantes para mantener fidelidad de las mismas.
Todo aquel que vaya en contra de lo que ellos digan es
considerado como un “rival”, y así se lo hacen ver a sus “seguidores”,
consiguiendo que estos también sientan desprecio y recelo. ¡No les basta con tener poder, siempre están
buscando más!
Analizan y controlan todo como un juego de mesa, donde
ven a los otros como fichas.
5.- Son egocéntricos
Sienten que se merecen todo lo que desean. Muchas
veces suelen cruzar la barrera del egocentrismo al narcicismo, llegando a sentirse
seres superiores dignos de lealtad y con autoridad sobre otros.
6.- No les
importa el cómo, sino el qué
No miden el alcance de sus acciones, siempre y cuando
puedan cumplir con sus propios intereses.
Es por ello que estos sujetos son considerados como
tóxicos, aunque su poder de influir sobre los demás se vuelve casi
imperceptible. Tal vez esta sea la razón por la que logran convertirse en
líderes que arrastran masas.
En resumidas cuentas, marcar distancia de alguien con
comportamientos maquiavélicos, podría resultar la mejor alternativa para
evitarte problemas.
Por el contrario, si te has sentido identificad@ con
esta descripción quizás necesites ayuda de un profesional. Ponte en contacto
con Mi Psicólogo Getxo en el 675 713 537.