PERSONALIDAD COMPETITIVA: CUANDO GANAR LO ES TODO

¿Sabías que hay personas que necesitan destacar y ganar siempre en todo? ¿Has conocido a alguien así? O más aún, ¿eres tú una persona competitiva? Sin importar cuáles sean tus respuestas, te sugerimos que te quedes con nosotros, ya que vamos a abordar el tema de la personalidad competitiva. 

Las personas que tienen una personalidad competitiva son aquellas que constantemente tienen que destacar en cualquier actividad que realizan. Parecen tener una necesidad patológica de reconocimiento y siempre tienen que ganar, ya sea en algún juego o en cualquier otra actividad.



¿Qué caracteriza a una persona competitiva?

Tal como ocurre con todos los trastornos de la personalidad, en lo que respecta a la personalidad competitiva existen ciertos rasgos o características que permiten identificarla.

Lo primero que hay que saber de las personas con personalidad competitiva es que no suelen confiar en los demás para llevar a cabo ningún trabajo o tarea. Así mismo, como lo que les gusta es destacar, intentan no realizar trabajos en equipo, y hacerlo de forma individual. Esto se debe en gran parte a que siempre quieren tener el control en todo, pues no soportan que su éxito dependa del desempeño de otros.

Así mismo, este tipo de personas son egoístas y poco empáticas. Esto se traduce en que para ellos es totalmente intolerable e insoportable ver triunfar a alguien más. Para ellos lo más importante es ganar y no soportan ver a otros hacerlo.

Igualmente, para las personas competitivas no hay nada más importante que competir. Es por esto que prácticamente convierten todo en una competencia. Para ellos, todas las actividades que realizan es una oportunidad para lucirse y demostrar que son los mejores. Son personas que pueden llegar a ser insoportables porque incluso hasta un simple juego lo convierten en una competición encarnizada cuyo único objetivo es ganar.

Estas personas solo ven la vida de forma dicotómica, es decir, desde los extremos. Por ejemplo, las cosas o son buenas o son malas. O se gana o se pierde. O se es exitoso o se es un fracasado. Como puedes darte cuenta, es una forma muy radical de ver la vida, ya que sabemos que las cosas no son negras y blancas, sino que entre ellas existe toda una gama de grises que también tiene valor.

Como es de esperar, son personas que pueden tener muy mal carácter, especialmente cuando no alcanzan sus objetivos, es decir, cuando no ganan. Si esto ocurre, incluso pueden llegar a agredir físicamente a la persona que los superó. Definitivamente las personas con personalidad competitiva pueden llegar a ser un poco desagradables.



Ser competitivo… ¿Es algo negativo?

De forma general, la respuesta a esa pregunta tendría que ser No. Por supuesto que ser competitivo no es algo negativo. Ser competitivo ayuda a las personas a querer ser mejor, les da un incentivo para alcanzar metas y superarse a sí mismo.

Por supuesto, a todos nos gusta ganar y ser exitosos. Sin embargo, el problema surge cuando ganar se convierte en una obsesión y se comienza a valorar el esfuerzo tomando en cuenta solo el resultado obtenido. Cuando ya lo único que importa es ganar a cualquier precio y destacar por encima de los demás, es cuando podemos decir que ese rasgo se está convirtiendo en un gran problema en tu vida.

Las personas que sufren de una personalidad competitiva obsesiva experimentan ciertas consecuencias a nivel psicológico. Por ejemplo, son personas que sufren de miedo al fracaso. Para ellos perder es algo inconcebible y simplemente no lo consideran como una opción válida para sus vidas. Así mismo, desde el punto de vista emocional, son inestables, con cambios de humor frecuentes y repentinos. Todo esto puede llevar a la persona a tener sentimientos de frustración, insatisfacción e infelicidad.

Evidentemente, competir de vez en cuando no es malo. Querer ser mejor cada día y destacar no le hace mal a nadie. Sin embargo, es importante estar pendiente de las señales que indican que ganar se está convirtiendo en una obsesión. Si esto ocurre, lo más recomendable es buscar ayuda especializada a tiempo para evitar consecuencias que hagan mella en la salud.